Trump telefonea a Ghani para condenar el "bárbaro" atentado con camión cisterna en Kabul

La Casa Blanca ha detallado en un comunicado sobre la conversación que Trump ha recalcado la "naturaleza bárbara" del ataque, resaltando que "los terroristas son enemigos de todos los pueblos civilizados".

Asimismo, el mandatario estadounidense ha aplaudido además la "valentía" de los servicios de emergencia y los esfuerzos "dedicados" de las fuerzas de seguridad para "defender al pueblo afgano de enemigos que buscan negarles la seguridad y prosperidad que tanto merecen".

La Embajada de Estados Unidos está trabajando con las autoridades afganas y la OTAN para ayudar a las víctimas e investigar el atentado, cuya autoría no ha sido reclamada por el momento, si bien los talibán se han distanciado del mismo.

Por su parte, fuentes del Departamento de Estado han confirmado que once contratistas estadounidenses han resultado heridos en el atentado, tal y como ha recogido el diario 'Washington Examiner'. "Ninguno parece sufrir heridas que pongan en peligro su vida", han agregado.

El secretario de Estado, Rex Tillerson, ha publicado un comunicado condenando "este acto cobarde y sin sentido" y expresando sus "profundas condolencias" a los familiares y amigos de los muertos y heridos.

"Rezamos por la pronta recuperación de los estadounidenses y afganos que son miembros del personal de nuestra misión que resultaron heridos en el ataque, y aplaudimos a las fuerzas de seguridad, policía y profesionales médicos que respondieron de emergencia en el lugar", ha señalado.

Tillerson ha recalcado que "el compromiso de Estados Unidos con Afganistán es inamovible", añadiendo que "Estados Unidos permanece junto al Gobierno y el pueblo de Afganistán y seguirá apoyando sus esfuerzos para lograr la paz, seguridad y prosperidad del país".

Las autoridades han confirmado que el ataque ha sido perpetrado cerca de la Embajada de Alemania, si bien en la zona se encuentran otras embajadas. El objetivo del ataque aún no ha sido determinado.

El ataque ha provocado daños materiales en varios edificios colindantes y ha dejado los hospitales y centros médicos de la capital afgana colapsado por el elevado número de víctimas. El Ministerio de Salud Pública ha cifrado en 380 los heridos.