El TPI aclara que no ha detectado ninguna filtración en relación con la información sobre Ocampo

La información se basa en 40.000 documentos que incluyen correos electrónicos personales, balances contables y cables diplomáticos y contienen datos sobre el periodo en el que Moreno Ocampo estuvo al frente de la Fiscalía del TPI, por lo que se ha especulado con que pudieran proceder de La Haya, lo que pondría en cuestión su sistema de seguridad.

"La Corte desconoce cómo se ha obtenido esta documentación", ha aclarado en un comunicado. "A la luz de las recientes informaciones periodísticas, la Corte ha llevado a cabo comprobaciones adicionales y, hasta ahora, no hay indicios de que nuestros sistemas se hayan visto comprometidos", ha afirmado.

El TPI ha subrayado que desde que comenzó su andadura, en 2002, "se han tomado muy en serio las operaciones que tienen que ver con la seguridad de la información y se han desplegado todos los esfuerzos para poner en marcha medidas y sistemas para proteger la integridad de la información sensible".

Por otro lado, en relación con la situación personal de Moreno Ocampo, que habría tenido varias empresas fantasma en paraísos fiscales durante su mandato como fiscal jefe, el TPI ha indicado que desde 2015 los altos cargos de La Haya están obligados a informar sobre su situación financiera, pero que en la época del jurista argentino no era así, por lo que la Corte "desconocía sus gestiones financieras privadas".

La actual fiscal jefe, Fatou Bensouda, ha anunciado, por su parte, que ha puesto en conocimiento del Mecanismo de Supervisión Independiente que tiene el TPI las informaciones del EIC que afectan a dos trabajadores de su oficina para que abra una investigación al respecto. "Me tomo estas acusaciones muy en serio", ha dicho.

Además, ha indicado que desde que Moreno Ocampo dejó el puesto la Fiscalía del TPI no le ha proporcionado información sobre ningún caso. Es más, de acuerdo con Bensouda, cuando inició su mandato le pidió expresamente que no hiciera declaraciones públicas que pudieran interferir en la labor del organismo internacional o "dañar su reputación".

Bensouda ha garantizado que todas las denuncias que llegan a la Fiscalía del TPI son gestionadas conforme a lo establecido en el Estatuto de Roma --tratado fundacional del TPI--. "Baso todas mis decisiones en valoraciones independientes", ha enfatizado.

"Las desafortunadas acusaciones que se tratan aquí no distraerán a mi oficina en su intento por intentar crear un mundo más justo. Haré todo lo que esté en mi mano para, de forma independiente, imparcial y objetiva, buscar justicia con dedicación e integridad", ha remachado.

Las palabras de Bensouda se deben a la relación laboral que, de acuerdo con el EIC, Moreno Ocampo ha establecido con el magnate del petróleo libio Hasán Tatanaki, relacionado con el general Jalifa Haftar, cuyas fuerzas están siendo investigadas por el TPI por posibles crímenes de guerra y de lesa humanidad.