Drones, cámaras de videovigilancia y control de huellas digitales son parte del importante despliegue para que los nueve millones de estudiantes chinos no copien en las pruebas de selectividad. La cantidad equivale a todos los estudiantes de Madrid, los de Valencia, Zaragoza, Sevilla y todos los de Barcelona participaran. Ellos se lo toman muy en serio y se dejan las fuerzas en tratar de superar los exámenes, en ello les va la dignidad de toda la familia.