Este jueves los británicos eligen a su nuevo primer ministro y la actual inquilina de Downing Street, Theresa May, no las tiene todas consigo. Convocó estas elecciones, adelantadas, por sorpresa hace apenas mes y media con 20 puntos de ventaja sobre los laboristas. Pero la izquierda ha hecho un sprint espectacular aprovechando los errores de May.
