El MI6 contratará a un millar de espías y analistas para afrontarlas nuevas amenazas tecnológicas

El MI6 ha alegado que el aumento de personal es completamente necesario para poder luchar contra nuevas amenazas como los ataques cibernéticos o el seguimiento cibernético por parte de otros países de las actividades de los servicios de espionaje británicos.

El MI6, donde trabajan alrededor de 2.500 personas, se encarga de obtener información y de las operaciones de espionaje en el extranjero, mientras que el MI5 es el responsable de las operaciones dentro del territorio británico.

El Gobierno británico anunció en 2015 que aumentaría el personal de sus servicios de Inteligencia en unas 1.900 personas, de las cuales 1.000 se destinarán al MI6. El personal restante trabajará para el Cuartel General de Comunicaciones del Gobierno (GCHQ, por sus siglas en inglés) y para una unidad policial antiterrorista.

En los últimos años, la actividad de los servicios de Inteligencia se ha estado centrando cada vez más en la web, ya que muchos sectores de la población perciben que es donde se concentran la mayor parte de las amenazas. Por otra parte, ciertas tecnologías, como el reconocimiento facial, están provocando que el trabajo de los agentes de los servicios secretos sea cada vez más complejo.

"La revolución de la información ha cambiado de manera fundamental nuestra forma de operar. Dentro de cinco años sólo habrá dos tipos de servicios de Inteligencia: aquellos que entienden este hecho y que han prosperado y aquellos que no. Estoy decidido a conseguir que el MI6 esté en la primera categoría", declaró el pasado martes el director del MI6, Alex Younger.

Durante su intervención en Washington, Younger expresó el temor que tienen muchas agencias de Inteligencia acerca de las capacidades que organizaciones terroristas como el Estado Islámico tienen en Internet. "Nuestros oponentes, que no siguen la ley o la proporcionalidad, pueden utilizar estas capacidades para vigilarnos y monitorizar nuestras actividades, por lo que tenemos que cambiar radicalmente nuestra forma de actuar", señaló.