Liberada la italiana secuestrada en Tinduf junto a dos cooperantes españoles

La cooperante italiana Rossella Urru, secuestrada el pasado mes de octubre en Tinduf (Argelia) junto a dos cooperantes españoles, habría sido puesta en libertad por sus captores, según ha confirmado la Policía de Cerdeña, de donde es originaria, a la espera de verificación por el Gobierno italiano.

Urru habría sido puesta en libertad a cambio de la excarcelación de un miliciano de Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI), según informa la cadena panárabe Al Yazira.

Los medios italianos identifican al miliciano liberado por las autoridades mauritanas como Abdelrahman Ould Madou, un tuareg miembro de la filial de AQMI en la región.

Por su parte, la web mauritana 'Sahara Media', citando "fuentes especiales" sostiene que Urru ha sido liberada junto a un policía, Aal Ould al Mujtar, quien también estaba secuestrado. Ambos deberían llegar este mismo sábado a Bamako (Malí) en avión, según estas fuentes.

Italia no cree en la liberación de Urru hasta que no la confirme

La enviada especial del Ministerio de Exteriores italiano, Margherita Boniver, se ha negado a dar validez a las informaciones sobre la liberación de la cooperante italiana Rossella Urru hasta que no pueda confirmar en nombre del Gobierno italiano la puesta en libertad de la voluntaria.

"Hasta que las noticias sobre la liberación de Rosella Urru no sean verificadas -y su verificación está en curso- se puede decir que no son ciertas", aseguró Boniver, designada como enlace ministerial para esta situación de emergencia, en declaraciones recogidas por Tgcom24.

Urru fue secuestrada el pasado 22 de octubre en los campamentos de refugiados saharauis de Tinduf (Argelia) junto a los españoles Ainhoa Fernández de Rincón, perteneciente a la Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui de Extremadura, y Enric Gonyalons, natural de Mallorca, cooperante de Mundubat.

Los secuestradores entraron en el campamento en un 4x4 y atacaron el lugar. Uno de los rehenes y un guardia saharaui resultaron heridos en el fuego cruzado con los secuestradores.