El Gobierno de Perú sospecha que el expresidente Toledo está en Estados Unidos

Un juez peruano aceptó el jueves la petición de la Fiscalía y dictó 18 meses de prisión preventiva contra Toledo, investigado por su supuesta implicación en una trama de sobornos vinculada a la constructora brasileña Odebrecht, a la que habría favorecido en la concesión de una autopista.

El Gobierno de Perú ha puesto el caso en conocimiento de la Interpol, que ha emitido un aviso rojo para tratar de arrestar a Toledo. A pesar de que los medios peruanos situaban hace sólo unos días al exmandatario en París, ahora las autoridades han aludido a su posible traslado a San Francisco.

"Se ha alertado a las autoridades de ese país, a través de su Embajada en Perú y de la nuestra en Estados Unidos, de la posible ubicación del expresidente Toledo. Se le ha solicitado a las autoridades colaborar con su detención y expulsión", ha afirmado el Consejo de Ministros peruano en un comunicado.

Las autoridades de Israel también han sido alertadas de la posibilidad de que Toledo "quiera ingresar a su país", ha añadido el Gobierno en la nota.

El Ejecutivo de Pedro Pablo Kuczynski ha asegurado que seguirá haciendo "todo lo necesario" para que se pueda aplicar a orden judicial contra el expresidente de Perú.

Los investigadores intentan aclarar si Toledo recibió 20 millones de dólares de Odebrecht a cambio de la adjudicación de dos tramos de la carretera Interoceánica Sur. El exmandatario ha negado las acusaciones.

Los supuestos pagos habrían empezado en 2005, cuando se acercaba el final de su Gobierno (2001-2006) y el dinero habría sido canalizado hacia las cuentas del empresario israelí Josef Maiman, amigo del expresidente, a través de sus empresas en paraísos fiscales, según informaciones periodísticas.