El presidente venezolano proclama el éxito de su controvertida Asamblea Constituyente. Dice que la participación ha sido del 41%. La oposición la rebaja al 12% y no reconoce estas elecciones. En un ambiente de violencia y fractura social, ahora Maduro amenaza con levantar la inmunidad de los diputados opositores. La comunidad internacional mira con preocupación al país.