44 días después de las elecciones seguiremos con la duda de quién se presentará a la investidura. El presidente el funciones, Mariano Rajoy, sigue sin querer porque sabe que no puede. Mientras los socialistas siguen enredados en sus asuntos internos y preparan pactos por si el rey le propone que intente formar gobierno. Pedro Sánchez dice que hablará con la derecha, con Ciudadanos, y con la izquierda. Una mezcla que la marca catalana de Podemos ve imposible.