El Rey Felipe VI ha pisado el Parlamento europeo por segunda vez. Todo han sido honores hasta que han llegado los desplantes, que han venido de la parte española. Los eurodiputados de IU se han ausentado y en su lugar dejan una gran bandera republicana y una independentista gallega. Tras el discurso del rey, el auditorio se ha puesto en pie, salvo los eurodiputados de Podemos que se han quedado sentados y sin aplaudir.