El TSJM prohíbe al juez Silva acceder a e-mails de Blesa

En un auto, el magistrado Jesús Gavilán considera "absolutamente improcedente" que Silva tenga acceso a "todos" los correos electrónicos del banquero ya que muchos de ellos afectan a su "estricta intimidad".

El juez, que instruye la querella de la Fiscalía contra Silva por su investigación del 'caso Blesa', acuerda tener por incorporados a la causa los e-mails que "guardan relación" con la investigación sobre el crédito concedido por Caja Madrid al ex presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, de la que emana la causa abierta en el Tribunal Superior de Justicia.

Sin embargo, impide a la defensa de Silva examinar el resto de correos electrónicos por afectar a la intimidad de Miguel Blesa y ser "irrelevantes" para este procedimiento. "Afectan a la estricta intimidad del perjudicado", recalca.

El Tribunal Superior insta al fiscal, a las acusaciones particulares --ejercidas por Blesa, su abogado y Díaz Ferrán-- y a la propia defensa de Silva a interesar las diligencias que consideren oportunas, "especialmente la declaración del querellado, con observancia a sus derechos constitucionales". Silva ha acudido en tres ocasiones al TSJ, aunque ha pedido más tiempo para examinar la documentación antes de declarar.

El juez criba los e-mails

En el auto, el instructor explica que ya ha realizado un examen previo de los correos electrónicos incorporados a la causa, habiendo descartado aquellos que "carecen de interés", y desvela que Blesa ya manifestó su oposición a que fueran analizados por "afectar a su intimidad".

"El examen de todos los correos por el querellado y su defensa es absolutamente improcedente", razona Gavilán, que añade que muchos no aportan "nada" a la investigación abierta contra Silva por prevaricación, retardo malicioso en la Administración de Justicia y contra la libertad individual.

En este sentido, indica que otros "carecen de relevancia por tener un contenido totalmente personal, de la esfera íntima y de amistad o estrictamente laboral y profesional con terceras personas o intrascendente a los efectos aquí debatidos".

A su juicio, tampoco cabe "buscar o justificar ahora determinada motivación de las resoluciones dictadas al hilo de los eventuales resultados" que arroje la visualización de tales e-mails.