Susana Sumelzo, de la Ejecutiva del PSOE, dice que hay una campaña en su contra en Aragón por su apoyo a Sánchez

En su cuenta de 'Facebook', Sumelzo ha explicado que le han informado de que ha habido en Zaragoza una cena, a la que han asistido "varios compañeros", para iniciar "una campaña" en su contra. "Ante tal circunstancia, quiero trasladaros que jamás he sido desleal con Javier Lambán, nuestro secretario general, jamás", ha aseverado.

"Recuerdo lo que trabajé y como trabajé para apoyar su candidatura junto con el resto de compañeros alcaldes, diputados provinciales y lograr que fuese elegido por los militantes aragoneses. He trabajado con todos vosotros mano a mano y siempre llevando como bandera a Javier Lambán", ha agregado.

En este punto, Sumelzo ha insistido en que su recorrido está avalado por 16 años "de lealtad y de trabajo" que "jamás ha sido cuestionado". Ha recordado que lleva 23 años como militante del PSOE.

Ha relatado que el 26 de diciembre de 2015, Lambán les convocó a una reunión en la localidad zaragozana de Épila, y en ella expresó "una opinión política diferente de la suya".

"A partir de ese momento se me apartó y vetó incluso lo que es más grave, se instó a compañeros a que me vetasen y dejasen de hablar, reunirse conmigo e invitarme a sus pueblos", ha apostado. No obstante, ha afirmado que no se consiguió "el objetivo", dado que los compañeros "respetan" su trabajo.

"El PSOE es grande y todos vosotros lo sois, trabajáis día a día por vuestros vecinos. Seamos respetuosos con la diferencia de opinión política, no lo convirtamos en algo personal, eso es ser socialista. Y trabajemos juntos. Yo no me he ido. Algunos me han intentado expulsar e incluso se olvidaban que era candidata por la provincia de Zaragoza en acto electoral en mi propio pueblo. He sido objeto de multitud de humillaciones innecesarias", ha apostillado.

Sumelzo ha defendido que ella "jamás" a faltado al respeto "a nadie", dado que las discrepancias las ha resuelto hablando. "Respeto los órganos del partido y lo único que pido es que se respete mi diferente opinión política, la imposición de ideas no funciona".

"Queridos compañeros, soy socialista. Tengo altura de miras. Hemos de ir de la mano. Siempre he trabajado en equipo y nunca he tenido ningún problema. Solucionemos las diferencias de opinión debatiendo. La imposición, la mentira y el insulto no son admisibles", ha concluido.