El Gobierno da luz verde al acuerdo UE-Cuba para que lo ratifiquen las Cortes Generales

El acuerdo fue rubricado el 11 de marzo de 2016 en La Habana y firmado en Bruselas el 12 de diciembre, convirtiéndose en el primer Acuerdo bilateral entre la Unión Europea y Cuba y nuevo marco institucional para sus relaciones tras la derogación por el Consejo de la Unión Europea de la Posición Común, en diciembre de 2016.

Su objetivo es establecer un marco estable para las relaciones, reemplazando el diálogo 'ad hoc' y la cooperación por partes, que han caracterizado las relaciones de la Unión Europea con Cuba hasta ahora, según explica el Gobierno. Además, servirá para potenciar una cooperación más estrecha y para fortalecer el diálogo a través de una amplia gama de instrumentos.

La UE es el segundo socio comercial de Cuba y el mayor inversor extranjero. El Acuerdo de Diálogo Político y de Cooperación está llamado a ser un instrumento jurídico que ayude a favorecer el compromiso de la UE con Cuba, el progreso económico y político en la isla, y que sirva también para potenciar los intereses europeos.

El Ejecutivo explica que su objetivo es consolidar y fortalecer los vínculos entre la UE y Cuba en los ámbitos del diálogo político, la cooperación y el comercio, "sobre la base del respeto mutuo, la reciprocidad, el interés común y el respeto a su soberanía".

El Acuerdo incluye también otros elementos esenciales, como la cláusula de derechos humanos y la cláusula de no proliferación, cuyo incumplimiento puede conducir a su suspensión.

POLÍTICA, COOPERACIÓN Y COMERCIO

El Acuerdo se estructura en los pilares del diálogo político, la cooperación y el diálogo en políticas sectoriales y el comercio y la cooperación comercial.

El ámbito ligado al diálogo político abarca asuntos como los derechos humanos; armas pequeñas y ligeras, el desarme y la no proliferación de armas de destrucción masiva, el terrorismo, crímenes graves de trascendencia internacional, medidas coercitivas unilaterales, la lucha contra la producción, tráfico y consumo de drogas ilícitas, la lucha contra la discriminación racial, la xenofobia y formas conexas de intolerancia o el desarrollo sostenible.

El segundo de los pilares se refiere a una amplia gama de áreas de cooperación en el ámbito político y jurídico, sociales, ambientales y económicos y de desarrollo, incluso a nivel sub-nacional; con especial atención a la integración y la cooperación en el ámbito regional (Latinoamérica y Caribe).

PASO "MUY IMPORTANTE"

Por último, el acuerdo establece las bases para las relaciones comerciales e incluye disposiciones sobre la facilitación del comercio y la cooperación en áreas tales como los obstáculos técnicos al comercio, con el fin de mejorar el marco en que se desarrollan unas relaciones económicas más profundas. Recoge una cláusula que prevé el desarrollo futuro de un marco más sólido para la inversión.

El Gobierno de Rajoy celebra que este acuerdo representa un paso "muy importante" en el contexto de los avances que se están produciendo en la construcción de un marco institucional actualizado entre la Unión Europea y América Latina: Acuerdo de Asociación Unión Europea-Centroamérica, incorporación de Ecuador al Acuerdo Comercial Multipartes con Perú y Colombia, negociación para un nuevo Acuerdo de Asociación con México o las negociaciones para un Acuerdo de Asociación con Mercosur.