García Castellón cesa el jueves como juez de enlace en Roma y tendrá 10 días para pedir reingresar en la AN

Según regula el artículo 335 de la Ley Orgánica del Poder Judicial (LOPJ), desde el momento de su cese García Castellón tiene 10 días hábiles para pedir formalmente su reingreso en el Juzgado central al Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y, una vez éste le sea concedido otros 10 días hábiles para tomar posesión. Dependiendo de si estos plazos se agotan o no, lo previsible es que el juez instructor de la Audiencia Nacional se encuentre ya operativo para principios o como muy tarde mediados del próximo mes de julio.

García Castellón es el titular del Juzgado que hasta hace unas semanas dirigía el juez Eloy Velasco pese a que desde hace más de 16 años ha ocupado diferentes plazas en el extranjero.

El veterano magistrado retomará las causas pendientes en este órgano judicial, entre ellas los casos 'Púnica' y 'Lezo' que comenzó a instruir su antecesor, ascendido a la Sala de Apelaciones de la Audiencia Nacional. Pese ha haber cesado ya de su cargo, la semana pasada el CGPJ obligó a seguir en el juzgado hasta que se produzca el reingreso efectivo de García Castellón.

Su decisión de volver a la Audiencia Nacional obligó al órgano de gobierno de los jueces a excluir de la convocatoria de traslados que ya había sido convocada la plaza correspondiente al Juzgado Central del Instrucción número 6 de la Audiencia Nacional.

16 AÑOS FUERA DE ESPAÑA

El veterano juez Manuel García Castellón dejó la Audiencia Nacional hace más de 16 años para ser juez de enlace en Francia y después en Italia.

De tendencia conservadora, García Castellón ha trabajado durante los últimos años de la banda ETA en el puesto clave de juez de enlace en Francia desde 2000 y doce años después fue designado para ocupar la misma plaza en Francia. Fue galardonado con la Legión de Honor por el gobierno francés y recibió la encomienda de Isabel la Católica de manos de José Luis Rodríguez Zapatero.

Durante su etapa en la Audiencia Nacional García Castellón se encargó de sumarios de gran complejidad y trascendencia mediática como fueron el caso Banesto, que supuso el procesamiento entonces de Mario Conde; el que investigó las irregularidades de Jesús Gil al frente del Atlético de Madrid y el asesinato por ETA de Miguel Ángel Blanco.