El hombre que empotró su coche en Génova: "Me arrepiento y no volverá a ocurrir"

Daniel Pérez llevaba en el maletero de su vehículo dos bombonas de butano, 3 litros de gasolina, fertilizantes y un temporizador. Con esta carga se empotró en la sede del PP a las seis y media de la mañana. Dice que aprendió a hacer el artefacto viendo documentales en la televisión. Hoy ha declarado que nunca quiso hacer daño a nadie: “Estaba desactivada, eso no podía funcionar, era premisa importante y fundamental no hacer daño a nadie”. Los artificieros de la policía han declarado ante el juez que el artefacto era muy profesional pero el temporizador estaba desconectado, les llamó la atención que llevara también cadenas para la nieve, que es lo que los terroristas utilizan para causar más daños, pero que con el temporizador desconectado no podría funcionar. Daniel afirma que lo hizo para denunciar la politización de la justicia. El joven de 37 años hizo ensayos en el campo en Teruel antes de empotrar su coche en Génova. El informe psiquiátrico lo describe como un enfermo, con trastorno de personalidad, de características paranoides e impulsos pueriles. El abogado del acusado dice que no le da crédito a la prueba pericial y pide su absolución. Daniel era consciente de sus actos, hoy ha reconocido que cometió un error: “Me arrepiento, me he equivocado, no volverá a ocurrir” Se le acusa de un delito de fabricación y tenencia de explosivos y de un delito de incendio en grado de tentativa, el fiscal pide 6 años de cárcel para él, lleva ya 17 meses en prisión preventiva.