El recibo de la luz se abarata un 11% debido a la caída del precio de la electricidad

Esta caída es aún mayor, hasta el 14,5%, si se compara con respecto a enero del año pasado. De esta manera, el recibo de la luz rompe la tendencia alcista de los últimos meses de 2015 debido al descenso en el precio de la electricidad en el mercado mayorista debido, en una parte importante, a la mayor presencia de la eólica.

Esta evolución de precios corresponde a un consumidor medio similar al utilizado por el Ministerio de Industria en sus cálculos, con una potencia contratada de 4,4 kilovatios (kW) y una demanda anual de 3.900 kilovatios hora (kWh), propia de una familia con dos hijos.

En enero, este consumidor medio ha pagado un total de 62,94 euros por el recibo de la luz, frente a los 71,06 euros en el mes de diciembre o los 73,6 euros de hace un año.

Los 62,94 euros de enero se pagaron a razón de 15,2 euros por término fijo, 34,29 euros por el consumo, 2,53 euros por los impuestos eléctricos y 10,92 euros por el IVA.

Fuerte presencia de la eólica

Esta caída se debe en gran parte a los fuertes vientos registrados a lo largo del mes en la Península, especialmente en las primeras semanas, y que han aumentado notablemente la generación eléctrica con energía eólica que, al ser de las más baratas del 'mix', ha ocasionado un descenso en el precio de la electricidad en el mercado mayorista.

La producción de origen eólico creció casi un 26% más con respecto al mismo periodo del año pasado y representó en torno al 27% de la producción total en enero.

En concreto, los precios a lo largo del mes de enero han sido más de un 30% más baratos que en el pasado mes de diciembre y que en el primer mes del año pasado.

Así, el precio medio de la electricidad en el mercado mayorista a lo largo del mes de enero ha sido de 36,5 euros el megavatio hora (MWh), frente a los 52,61 euros de diciembre y los 51,7 euros de enero de 2015, según datos de Omie, el operador del mercado mayorista.

Esta caída en el precio de la electricidad no se traslada con igual fuerza a la factura de la luz de los consumidores, ya que en el recibo se incluyen diferentes conceptos que hacen que más del 60% de su importe sean costes ajenos a la energía consumida, aunque sí que tiene su reflejo en una parte de ella.