Bruselas acepta con condiciones la compra de Telecom Italia por Vivendi

"La Comisión ha llegado a la conclusión de que, con las medidas correctivas propuestas, la operación no limita de manera significativa la competencia en el espacio económico europeo", ha explicado la institución en un comunicado.

En el examen de la operación, que le fue notificada el pasado 31 de marzo, el Ejecutivo comunitario analizó tanto las consecuencias en el mercado de las redes terrestres digitales (TDT), como en sectores ligados a las telecomunicaciones fijas y móviles, como son la publicidad, la música o los videojuegos.

En el segundo caso, Bruselas no halló indicios de que presentara problemas de competencia, si bien observó con reservas las consecuencias en el acceso al por mayor al mercado de las cadenas distribuidas por TDT.

Los servicios comunitarios temieron que, tras la compra de Telecom Italia, Vivendi elevara los precios de facturación a las cadenas de televisión en el acceso a las redes TDT para la difusión de sus canales, sector en el que Persidera (filial de Telecom Italia) y Mediaset (con participación de Vivendi) son actores de peso.

Esta estrategia hubiese beneficiado de manera directa (con Persidera) como indirecta (con Mediaset) a Vivendi, a juicio dela Comisión, habida cuenta de que "los otros actores en el mercado no representan alternativas viables para las cadenas".

Para superar las reservas de Bruselas, Vivendi se ha comprometido a ceder la participación de Telecom Italia en Persidera.

Con todo, Bruselas ha advertido de que su análisis responde únicamente a cuestiones de competencia y no se pronuncia sobre el impacto de la operación en la pluralidad de medios en Italia, un asunto que está siendo examinado por las autoridades del país.