Aura Garrido afronta el "abismo" de devenir una criatura marina en la adaptación al cine de 'La piel fría'

La actriz Aura Garrido se ha situado ante el "abismo" de dar vida a la criatura protagonista de la novela de Albert Sánchez Piñol 'La piel fría' en su adaptación al cine, una película homónima del director francés Xavier Gens, que ha presentado en el Sitges-Festival Internacional de Cine Fantástico de Catalunya.

En rueda de prensa este miércoles, Garrido --conocida por la serie 'El ministerio del tiempo' y el filme 'El cuerpo'-- ha explicado que ha puesto a prueba sus límites físicos y profesionales en el que ha calificado como su "mayor reto", por interpretar un personaje completamente físico, sin poder usar mirada, voz y gestualidad facial, y recubierta con un maquillaje prostético que tardaban ocho horas en colocarle.

Situada en una isla perdida en medio del océano, protagonizan la película dos hombres que se defienden desde en un faro del asedio de unas criaturas que emergen del mar, y la productora Denise O'Dell --cuya trayectoria reconocerá el festival la noche de este miércoles con la entrega del premio María Honorífica-- ha remarcado que el escritor aseguró que la ambientación era como la había imaginado.

El equipo buscó un lugar volcánico en el que rodar y, tras rechazar Islandia por las temperaturas extremas, eligieron Lanzarote (Islas Canarias), con un ambiente más cálido que supuso más problemas para los dos protagonistas masculinos, que llevaban un vestuario muy grueso de la época.

Para el guión siguieron en gran medida la estructura del libro, y el director se interesó en el proceso creativo de Sánchez Piñol, que anteriormente era antropólogo; en sus conversaciones abordaron el tema de la Teoría de la Evolución: "A Sánchez Piñol le habría encantado ser Darwin. En esta historia, 'La piel fría', estamos viendo su propia idea de la evolución", ha dicho.

Gens ha explicado que ha dado a la película un tratamiento estético romántico del siglo XIX, con influencias del pintor Caspar David Friedrich y los poetas John Keats y William Blake, a la vez que buscaron darle un aire épico, mostrando hordas de criaturas que atacan el faro, y que requirieron cinco años de búsqueda del proceso técnico, en el que realizó un trabajo importante Félix Bergés.

HUMANIZAR LAS CRIATURAS

También ha abogado por "humanizar a las criaturas", no tratarlas como monstruos, y ha subrayado la necesidad de que parecieran creíbles, como seres que evolucionaron paralelamente a los humanos desde un carácter anfibio, por lo que además de conversar con el escritor, preguntó a expertos sobre cómo habría sido esta evolución en una isla.

El director ha hecho prevalecer la visión romántica sobre la explícitamente carnal en la relación amorosa que surge entre dos personajes, para ahondar más en las motivaciones de las decisiones que toman y evitar que sean evidentes.

"Ha sido un trabajo de máscara" y en equipo, ha afirmado la actriz sobre la criatura que interpreta, y para la que buscó con los especialistas y el director el movimiento exacto con el que el personaje mostrara ante la cámara su alma y sus emociones, con una mayor humanidad en relación a las otras criaturas, para lo que la actriz realizó también entrenamiento físico.

O'Dell ha explicado que para poder llevar el relato a la pantalla necesitaron doce años, en los que rechazaron diferentes adaptaciones del guión y apostaron por un tipo de película más europea, en contraposición con las estadounidense, y ha alabado el papel de los actores David Oakes y Ray Stevenson, que no han podido asistir al festival por tener otros compromisos profesionales.