Vuelve la calma a la Sierra de la Plata, en Cádiz

Las 700 personas que fueron desalojadas este pasado sábado del Hotel Atlanterra y de sus viviendas por el incendio registrado en la Sierra de la Plata, Tarifa, ya han sido autorizadas a volver a sus alojamientos. Los trabajos de extinción del incendio evolucionan de forma "favorable", con lo que se espera que se pueda declarar el estado de estabilizado en las próximas horas.

El dispositivo ha realizado un importante despliegue de medios en la zona, dada la cercanía de zonas urbanizadas y un hotel al lugar del siniestro, que finalmente no han quedado afectadas. Dadas estas circunstancias, el incendio ha sido declarado de nivel 1, por la posible afección a bienes no forestales, y la protección de dichas zonas ha sido la principal prioridad de los trabajos de extinción. Además de esta circunstancia, el viento de levante en la zona, con rachas de mucha intensidad, ha complicado de forma significativa los trabajos de extinción.

El de Lleida va perdiendo fuerza

Por otro lado, el incendio de Agramunt, en Lleida, ya está en fase de control. Ha quemado 5.100 hectáreas de vegetación, el 27 por ciento de las cuales forestales. Según han informado los Bomberos de la Generalitat aunque todavía hay puntos activos en la zona del perímetro, el incendio no se propaga.

Se sigue investigando la causa que pudo originar el incendio, pero de momento la caída de un cable eléctrico es la hipótesis que tiene "más fuerza" entre los Agentes Rurales, según ha informado el conseller de Medio Ambiente, Francesc Baltasar.

Los servicios de emergencia localizaron la noche del pasado viernes el cadáver de un hombre de 80 años de edad en el perímetro del incendio de Agramunt (Lleida). La identidad de la persona fallecida no ha sido facilitada. El cuerpo fue encontrado junto a un vehículo caído en un bancal en la zona de Cabanabona.

40.000 hectáreas calcinadas en España

El monte español ha perdido este año por culpa de los incendios forestales casi tantas hectáreas como las arrasadas por el fuego en todo 2008, en concreto alrededor de 40.000 hectáreas de superficie. Es un dato preocupante, ya que todavía quedan dos meses de verano.

La organización conservacionista WWF advierte de que los esfuerzos tienen que concentrarse en alcanzar una máxima colaboración para denunciar en caso de detectar algún incendiario, y en llamar urgentemente al 112 si se detecta cualquier posible fuego.