Las grandes cosas empiezan siempre a ras de suelo y bien lo sabe Stuart Weitzman que lleva 30 años haciendo que sus zapatos pisen con éxito por todo el mundo. De las alfombras rojas a las pasarelas, nada se le resiste a los diseños de este americano. Tal vez el secreto de Weitzman resida en Alicante, donde fabrica y distribuye esas maravillas de tacón de las que todas las mujeres alaban su comodidad y belleza.