Con gran serenidad ha revivido Ester Quintana, ante el juez, el momento en que una pelota de goma se llevó su ojo izquierdo para siempre y lo ha hecho en presencia del Mosso D' Esquadra que, presuntamente, le disparó en una manifestación en Barcelona hace cuatro años. Además ha señalado con un gesto el tamaño del arma que vio a unos 30 metros de ella y con el que se realizó el disparo.