El Consejo de Ministros aprueba una ayuda para los parados sin cobertura

Más de 3.000 personas se han beneficiado de la ayuda a los desempleados que hayan agotado la protección y no dispongan de ingresos, según ha asegurado el ministro de Trabajo e inmigración, Celestino corbacho.

Esta medida ha sido aprobada este jueves en el Consejo de Ministros extraordinario que ha celebrado el Gobierno. Las ayudas entrarán en vigor este 14 de agosto pero tendrán efectos retroactivos desde el 1 de agosto.

Las ayudas están destinadas a parados que hayan agotado las prestaciones y subsidios y no dispongan de rentas. Estos recibirán una cantidad de 420 euros al mes, durante seis meses, evitando así que "queden desamparados desde el punto de vista de la protección social".

A cambio, el perceptor de esta renta "asumirá el compromiso con el servicio público de su comunidad autónoma de participar en un itinerario de formación y empleo", explicado ayer el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho.

Corbacho destacó que el objetivo de esta iniciativa, cuya duración no acaba de convencer a los sindicatos, "no es el de hacer un subsidio, sino el de dar una renta de protección para que las personas que la reciban tengan acceso a una formación y puedan volver al empleo lo antes posible".

Ley de la Economía Sostenible

Además, el Consejo de Ministros de este jueves ha realizado una primera lectura del proyecto de Ley de la Economía Sostenible. Como ya anunció el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, esta norma sentará las bases de un nuevo modelo económico, centrado en la innovación, el conocimiento y la sostenibilidad energética.

Así, el Ejecutivo ha dado este jueves el primer paso en la tramitación de la Ley, que previsiblemente se realizará con carácter de urgencia. En septiembre, el texto será estudiado con los agentes sociales.

Ayudas por los incendios

Otro de los asuntos en la mesa del Consejo es la aprobación de las ayudas para compensar las pérdidas causadas por los incendios forestales, que han dejado once muertos este verano y 76.500 hectáreas quemadas en los primero siete meses del año, más del doble que en 2008.