Manuel García explica que desde mayo de 2014 hasta enero de 2015, su mujer fue ingresada en varias ocasiones y no se le suministró el medicamento Sovaldi hasta 17 días antes de su muerte. "A mi mujer ya no me la van a devolver, pero que valga para dar los medicamentos. Los están dando a cuentagotas. El que tenga la hepatitis C está perdido", dice Manuel. Además, Manuel dice que "con lo que cuesta el Senado, podría salvarse mucha gente".