Tras la ‘guerra de banderas’ en el Ayuntamiento de Barcelona, Alfred Bosch hacía públicas sus disculpas. El vicesecretario sectorial del PP, Javier Maroto, apuntaba que cuando uno se equivoca lo adecuado es pedir disculpas y añadía que son bienvenidas pero que quien tiene que aceptarlas es “el pueblo catalán”.