“El episodio, la repetición de numeritos a la que nos está acostumbrando la CUP es lo más indigno que se puede plantear en política”, decía García Albiol y añadía: “Lo grave es que tanto Convergencia Democrática como Artur Mas estén aceptando este juego, Artur Mas nunca podía haber imaginado caer tan bajo ante unos antisistema que quieren romperlo todo”.