Tras 30 días ingresada, Teresa Romero ha recibido el alta médica. El equipo médico que le ha atendido le acompañaba a su salida y, ya junto a su marido, se dirigía a la prensa para dar las gracias a todo el equipo que le ha atendido “pese a la nefasta gestión política”. Además, se mostraba dispuesta a ayudar en lo que pueda: “Si con mi sangre se puede curar aquí estoy hasta quedarme seca”, decía.