Jero quiere que Andrés sienta lo que su padre ha sentido cuando su hijo le ha echado de casa. Por eso llevan a cabo una medida extrema: cambiar la cerradura de casa e impedirle su entrar a ella. Sus padres se muestran firmes con el apoyo de ‘Hermano Mayor’ y Jero le advierte que no va a dormir más en esa casa, hasta que se lo merezca. Andrés hace oídos sordos e intenta acceder al hogar pero un agente de seguridad le cierra paso.