Kenny se deja llevar fruto de la borrachera y autoriza a Julián a que invierta todo su cash en sus negocios, consiguiendo triplicar su dinero. Visto el resultado, el resto del 'Gym Tony' le suplica que invierta su dinero. Patricia, por su lado, acaba daliendo airosa de la situación al ver como todo el gimnasio se entera de que los negocios de Julián son faudulentos.