Paco Acedo, explorador polar, en su viaje al último pueblo esquimal habitado del norte de Groenlandia, ha buceado bajo la capa de hielo. Como ha explicado, ha pasado miedo porque sabe que si hay algún problema, hay pocas opciones para solventarlo, pero ha asegurado que una vez sumergido el espectáculo natural es tal, que uno no quiere salir a la superficie. “Hay catedrales submarinas”, ha asegurado.