La inocencia de los niños no conoce la discriminación
Esta pequeña historia nos enseña que el racismo es algo que aprendemos de mayores, lo demuestra la inocencia de estas niñas que están a punto de conocer a su hermana recién adoptada, es negra, y ellas todavía no lo saben. Su primera reacción es de felicidad absoluta, las niñas lloran de emoción, el color de la piel es lo de menos para ellas, ni un sólo comentario sobre eso, sólo la alegría por su nueva hermana y el deseo inmenso de abrazarla.
Toda una lección de inocencia y respeto para muchos adultos.
La mirada de los niños está limpia de prejuicios, lo comprobamos cuando este conocido youtuber sale del armario ante su hermano de cinco años, un gesto que lo dice todo. Una tierna reacción del pequeño que además va más allá, el amor es el amor canta, y termina sorprendiendo a su propio hermano con esta revelación.
Si estas historias no prueban que el odio y los prejuicios son algo que se aprenden, no sabemos qué podrá hacerlo.