Siria, cultivando vida en mitad de la guerra

En la azotea de un edificio destruido por las bombas, en medio del desastre absoluto, un hombre cultiva con mimo un semillero. El verde frente al gris, la vida buscando su hueco donde sólo hay muerte. Esto es la ciudad siria de Alepo.

Muy cerca, un anciano de 70 años escucha su viejo tocadiscos entre los escombros de su casa. No queda nada a salvo, sólo se mantiene vivo su amor a la música.

Estas y otras fotografías las podemos encontrar en el perfil de Twitter de Miguel Ángel. Trabaja en comunicación de Cruz Roja, pero a nivel personal tuitea todos los días desde hace meses sobre la guerra de Siria. Intenta que no nos olvidemos de que todo esto está pasando no tan lejos de nosotros. Y se centra en las víctimas. Gracias a eso, vemos que la capacidad de sobreponerse al horror de los sirios, tras seis años de guerra, es impresionante.

Esto es también resiliencia, ir al cole aunque la escuela haya sido bombardeada. O disfrutar de un baño aunque la piscina sea un cráter provocado por una bomba.